El GC 777 tiene su base cerca de El Cairo; se creó en 1977, después de una serie de ataques terroristas preocupantes para Egipto. La fuerza inicial se componía de tres oficiales, cuatro suboficiales y 40 soldados que tenían poca experiencia en operaciones antiterroristas, ya que solo habían combatido como tropas convencionales.
En Egipto, los problemas del terrorismo empezaron en 1972, cuando su presidente Anuar El Sadat ordenó la expulsión de 30.000 consejeros soviéticos (Hay otras fuentes que estiman que la expulsión de los soviéticos fue provocada por el deseo de Sadat de tener las manos libres para preparar en secreto la Guerra del Yom Kippur, contra Israel, que estallo en 1973). Esta decisión irritó a los grupos terroristas árabes que empezaron a ver a Egipto como un enemigo y objetivo de sus ataques. No eran simples amenazas, como pronto descubrieron los servicios egipcios de inteligencia.
Hubo dos grupos terroristas árabes que justificaron las preocupaciones de Egipto: la facción de Abú Nidal y el Frente para la Liberación de Palestina (FLP).
En 1978, el GC 777 fue enviado a Chipre cuando el FLP secuestró un avión de Air Chipre en ruta El Cairo – Nicosia. La operación se preparó en una sola hora, con lo que nadie se acordó de avisar a las autoridades chipriotas de la inminente llegada del GC 777. Cuando los miembros del GC 777 iban por la pista hacia el avión secuestrado, la policía local los confundió con terroristas y abrió fuego. El consiguiente tiroteo duro casi hora y media y costó la vida a 15 miembros del GC 777 y a varios chipriotas. Por malo que fuera este incidente, lo malo estaba por venir. La segunda “operación” ocurrió cuando unos terroristas palestinos del grupo Abú Nidal secuestraron el vuelo 648 de Egyptair en el aeropuerto de Atenas, obligándole a ir al aeropuerto de Luka en Malta. Este avión fue secuestrado como venganza, por no haber protegido Egipto a los terroristas que se habían apoderado del trasatlántico de cruceros Achille Lauro. Lo curioso es que el avión secuestrado fue el mismo que se utilizó en primer lugar para transportar a los terroristas del Achille Lauro.
Esta vez Egipto tuvo especial cuidado de que el gobierno de Malta tuviera conocimiento de la llegada del GC 777. Sin embargo, al llegar al aeropuerto, el grupo cometió una serie de tremendos errores. En primer lugar, no estuvo vigilado el aeropuerto antes de asaltarlo. En segundo lugar, no interrogó a ninguno de los rehenes que habían sobrevivido a un intento de ejecución por parte de los terroristas. En tercer lugar, no estudiaron el plano del Boeing 737 secuestrado. Y en cuarto lugar, no intentaron usar granadas “de aturdir” para desorientar a los terroristas antas del asalto; en vez de eso, su plan fue poner una carga explosiva en el techo del avión, para abrir un agujero y así entrar en él, y, al mismo tiempo, aturdir a los terroristas.
Pero la realidad fue bien distinta. Cuando se hizo estallar la carga la explosión fue tan potente que hizo volar seis filas de asientos, matando a 20 pasajeros. Por si esto fuera poco, los asaltantes entraron en el avión disparando indiscriminadamente, matando e hiriendo a unos cuantos pasajeros más. El resto de los pasajeros salió corriendo del avión para escapar de la carnicería , siendo “cazados” por francotiradores apostados en vehículos cercanos que los tomaron por terroristas. En total murieron 57 rehenes, haciendo de esta acción unas de las mayores “chapuzas” de la historia de las Fuerzas Especiales. Por descontado que el GC 777 fue disuelto por un tiempo después de este incidente, pendiente de una investigación, aunque después se permitió que se formara otra vez, con una serie de cambios radicales en sus filas y en su organización.
Por razones muy comprensibles, el GC 777 prefiere mantener un perfil bajo y operar en el interior de Egipto como unidad antiterrorista. Actualmente se entrena con varias unidades occidentales, entre ellas el Delta Force y el SEAL americano y el GIGN francés.
Entre el equipo que emplea el GC 777 están los helicópteros Mil-8 y Westland Commando, vehículos sin placas para apoyo a la policía y un pequeño numero de embarcaciones.
Y entre las armas están el subfusil HK MP5, los fusiles M16 A2 y AK-47 y la escopeta Remington M870.
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